Los senderos antiguos son verdaderas máquinas del tiempo. Este nos lleva a conocer al último caudillo aborigen del cantón de Tijarafe, Atogmatoma, a través de uno de los lugares desde los cuales los auaritas vigilaban la paz del Valle.
Testimonio de ello es la conocida como Piedra del Guanche o Piedra del Rey, homenaje a Atogmatoma, en la que destaca un espectacular grabado soliforme.
En este punto, como si de un rey auarita se tratara lograremos un control visual de gran parte del Valle de Aridane y serán incluso visibles onces de los catorce municipios de La Palma, ya que estaremos en uno de los puntos más elevados de la isla, junto al majestuoso Roque de Los Muchachos.
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